domingo, 28 de febrero de 2010

Condicional Perfecto & Poker Face

Ahhh sería hermoso, her-mo-so. Te imaginás? Ni un filtro, ni una culpa, ni un momento de titubeo. Escrupu…que? Pff. Nada but the truth. Gorgeous. Lovely, really. Si sólo fuera de mi lado, obvio. Pero en serio, me encantaría, el típico “Vamos a tomar un café” con cada persona a la que alguna vez me hubiera gustado decirle algo (poco feliz) y no me animé. Como Meg Ryan en You’ve Got Mail1, o como todos los personajes de The Invention of Lying (recomendable). Sentarnos ahí, cada uno con su drink of choice en la mano, disfrutando de un momento súper agradable y de repente, sin cambiar el tono ni el volumen ni la expresión facial, tener un tsunami verborragico semi passive aggressive. De sólo pensarlo se me hace agua (o sea críticas constructivas) la boca. Terminar con un “nada, era eso lo que te quería decir, más o menos… espero que no te moleste. Uy! Estoy super atrasada, nos vemos!”

(1): Kathleen Kelly: I have you to thank for it. For the first time in my life, when confronted with a horrible, insensitive person, I knew exactly what I wanted to say and I said it.

No soy Carlitos

En mi casa, el detergente es detergente, no es una sustancia mágica gelificante todopoderosa. Los baños se limpian con un arsenal de productos, no con uno solo cuyo vocero es un fisicoculturista. Los pisos de mi casa están muy bien, limpios y pulcros, pero no son superficies reflejantes y no emiten florcitas que quedan levitando en el aire del living forever and ever (creo que de ahí también se puede deducir que las ventanas no huelen igual que un sundae de frutos rojos). No sé qué pasa con la industria de los productos de limpieza, pero están curtiendo esa onda publicitaria de casas mágicas y floripondiosas que difiere notablemente de la realidad. A mí me gusta mi casa así, y no creo que Carlitos esté fascinado con la visibilidad reducida (por las flores osho levitantes) y la fragancia penetrante de las praderas tecnicolor en su baño . Yo… así… estoy bien.

miércoles, 24 de febrero de 2010

Apocalypse not!

No sé si es la bomba atómicacadémica inminente, el frío desubicado o las insistentes publicidades de Ricardo Arjona en Viña del Mar (tanto overpriced minuto de aire por la televisación de un recital de verano? en serio? les parece?), pero hoy es otro día de enojo over-the-counter, así, genérico y sin receta. Estoy casi convencida de que Richard debe pensar todo en rima, hasta cosas como “ya pasó mas de un año/tengo que ir al baño/a sacarme esta barba/tiene que ser antes del alba”. Qué tipo molesto, con ese look Montecristo y el famoso racconto de sus días pordioseros en la calle Florida.

Highlight del día: shuffle me adivinó tres caprichos musicales seguidos yendo a la facultad (contra de este highlight [no podía faltar en un día careciente de optimismo]: eran las 7.20 am, figurate que el entusiasmo es más exigente a esa hora.)

N.B.: I'm not usually this misanthropic or ass-minded (?).

martes, 23 de febrero de 2010

Toto, I've a feeling we're not in Kansas any more.

El microcentro. Qué lugar horrible. Dios bendiga ese prefijo (¿?), porque la expansión de una zona en la que un taxímetro equivale a un título nobiliario sería catastrófica; los taxistas (orgullosos poseedores o portadores- el negocio de los dueños de los “móviles” es algo que me excede, tanto o más que el debate sobre los carriles exclusivos) pavoneando su poder mediante bocinazos que se traducen a insultos hacia nosotros, los (desdichados) civiles, en cada esquina. Cada esquina que, aparte de ser un núcleo de polución auditiva, esta finamente revestida con cartelería de toda índole, desde "Estacione aquí (de lo contrario, en media cuadra su automóvil le va a resultar un impedimento casi paralizante)" hasta "Sólo transporte público o con permiso" (permiso de quién? mi mamá me deja.)


No entiendo, no entiendo nada de lo que pasa en ese radio de… 5 cuadras a la redonda de la entidad bancaria que dio comienzo a todo (I wanna say… BCRA? Pero no estoy segura de que ése sea the source of all evil). No entiendo cómo puede ser que el epicentro monetario (la City suena tan bolichero que me da vergüenza [porque no soy el Bambino] y culpa [porque es una mentira importante, hay menos fiesta ahí que las Islas Malvinas en invierno]) sea un ambiente tan comunista: yo no sé si hay una cláusula en los contratos laborales de la industria bancaria o qué, pero por alguna razón todos (todos) los empleados de esta cuasi-maqueta se ponen de acuerdo todas las mañanas para ir vestidos iguales a sus (tan avecinados) trabajos.


Ah y lo de las peatonales… no quiero hablar del tema, me da claustrofobia pensar en Flor… de muchedumbre! Y la Recon…quista!

Good Vibrations

Pegatinas motivadoras.

domingo, 21 de febrero de 2010

D-day

Voy a caer en el cliché de hablar de los domingos. En realidad me molesta bastante que sean un tema tan popular, no lo ameritan.
Mi problema con los domingos tiene 2 ejes: el primero es que no sé como describir un domingo, no es "triste" ni "deprimente" la palabra que busco. No sé cuál es, y como no sé, recurro a términos cuyo significado a) desconozco ó b) no tiene nada que ver con la idea que quiero comunicar. Ej: Falafel. "El domingo pasado fue lo mas falafel que me pasó en la vida." Vaya uno a saber a) qué es un falafel (comida, sí, pero... qué? de qué origen? qué sabor tiene? cómo se prepara?) b) qué tendrá que ver un falafel con las actividades que realicé el domingo pasado o las emociones que éstas me produjeron?
El segundo tema que me preocupa del "día del descanso" es que no sé muy bien qué hay que hacer (?) durante esta jornada. Teniendo en cuenta que normalmente postergo todo hasta esta suerte de día D, no puedo cumplir con los requisitos implícitos en su nombre bíblico. Qué hago? Cumplo con mis responsabilidades o con mi rol como cordero del Señor? Si Dios quiere que descanse, sus deseos son órdenes, pero... Él me gestiona todo lo demás? Quiero que me toque el CGPC de Dios, dónde hay que vivir para que pase eso? En Luján o alguna otra localidad así... sacra?

martes, 16 de febrero de 2010

Seriously... signs?

Cuando era (más) chica, hace unos 8 años ponele, una de mis películas favoritas era “Un impulsivo y loco amor” (Fools rush in). Claramente, ya no. Me copaba, no sé porque… si era por la presencia de Chandler haciendo de no-Chandler o si era que Salma Hayek (en ese momento) me parecía linda y supongo que eso me generaba cierto orgullo latino (¿?). La película es una típica comedia romántica (eufemismo para chick-flick) en la cual Chandler (el nombre del personaje es irrelevante) es acosado por señales que lo llevan a ella (Salmita querida). Whatever.
Yo entiendo que es una idea genial para la trama y los símbolos que eligieron son cosas súper representativas de ella… como el Gran Cañón y no sé qué otra cosa, probablemente 2 o 3 elementos caricaturescos de la cultura mexicana. Ahora, hablando en serio…. The world is not full of signs ni te esta guiando a ningún puente de postal para que te reencuentres con tu media naranja (don’t even get me started sobre esa expresión. Odio las naranjas y, para colmo de males, con ½ no haces ni 10 ml de jugo).
Lo que pasa es que el micromundito que rodea nuestros (no los de Cupido, Dios, o cualquier otra deidad a la que le adjudicamos omnipotencia o, como mínimo, el poder necesario para sincronizar y coordinar la realidad para fusionar todas las fuerzas del universo y que justo encontremos una papa frita idéntica a la que él [figura antagónica de cualquier narración pseudo romántica] comía mientras veían la película que ahora mágicamente nos persigue a cada dvd club del conurbano. No, no hay escapatoria, la vas a ver, aunque te vayas a la sección de recitales en vivo o films independientes orientales.) ojos y sistema nervioso está poblado únicamente por imágenes que buscan duplicados en la realidad externa, la de verdad.
Yo no sé for a fact si eso es lo que pasa a nivel fisiológico, pero para mí es asi; eso es una verdad científica as far as my sometimes-narrow mind goes.
Teniendo en cuenta lo susodicho (big word), considero que la solución, expresada en método científico, es:
1) Cut the crap
2) Cerrar los ojos, la persiana, la cortina… lo que haga falta.
3) Hacer oídos sordos al ruido melancólico (ya sean baladas o rock pesado [eufemismo para “vocalistas masculinos enojados gritando"]) que interfiera.
4) Pensar clara y objetivamente (if possible) en lo que realmente está pasando, en lo que hay abajo de todo el papel de regalo de San Valentín.

miércoles, 10 de febrero de 2010

One thing im good at...

Retrospectiva. Eso me sale bien. Darme cuenta qué momentos me hicieron feliz y quiero repetir (1): (esa tarde de vegetación en la playa con amigos, la copa de agua que se gano un lugar en el top 5 de citas, la tarde de cielo nublado saltando en la cama elástica (saltarina para entendidos), el paseo alcoholizado al almacén a las 4am con tu hermana, la tarde de valijas, la matiné de terapia en grupo viendo maratones de series, los paseos en auto sin rumbo fijo con tu mejor amiga) y cuáles no (ejemplificar seria una falta de tacto y una contradicción al propósito de esta herramienta. Es difícil ponerla en practica, hacer que la epifanía retroalimentadora pase hoy y no espere hasta mañana. También sería de mucha utilidad ser un poco mas previsora y no dejar que pasen lo malos, pero I'm only human.

(1): "Happiness is the longing for repetition."--Milan Kundera