martes, 23 de noviembre de 2010

New Age, Old Shit

Necesito que me duela alguna parte del cuerpo, mi plexo solar me está pidiendo un time-out.

Who am I, what the fuck is up with all this organic shit and where is my Diet Coke?


N.B.: Googleando el plexo solar, aprendí que también se lo conoce como Celiac Plexus y entendí t o d o.


N.B. 2: Acá te pongo este dibujito que ni idea, pero queda lindo y al final nadie entiende del todo el tema del plexo y los chakras y demás (con o sin diagrama).

lunes, 22 de noviembre de 2010

It's All About Manners

En una fila de 4 asientos, mi único compañero lejano y yo nos dividimos el territorio de manera lógica: 2-2. Ubiqué mis dos almohadas en mi lado de la frontera y zzz. Te digo, así la colonización da gusto. Si Cristóbal Colón se te sienta al lado en el cine, acapara el apoyabrazos en su totalidad... y de una, no cabe duda. Yo te avisé, you clueless little native dude.

Monkeys and Silk

Mi papá no sabe (y no le pienso contar)(y ojalá no lea esto) que la mejor parte de poder usar el vip del aeropuerto es el whiscola “de arriba” (arriba-Dios, no arriba-avión, eso viene después). Tampoco sabe que me quise matar después de entrar al vip del vip porque eran todos viejos muy corporate y sus respectivos felinos-percheros de LVs. En fin, acá estoy, reporting live, preguntándome por qué la tele está prendida en el canal de 678 y no en.. no sé, la BBC o Magazine, ponele, algo más a tono. 
Ahora la fauna local habla de los precios del Conrad (que todos conocen de memoria cual preámbulo de la Constitución: “nos, los representantes de la cachudez…”) Yo, en cambio, comparto una complicidad tácita con la moza; le digo que hay que reciclar vasos y “no desperdiciar” -una moralidad que no condice con la piel que bordea la capucha de mi abrigo. A todo esto, tengo chipás en la cartera y, en otro orden de cosas:
  1. Que bajón los bebes feos, no? Qué se hace con eso?
  2. Hay uno en 678 que, te juro, es Anthony Hopkins, posta.
  3. Cabito y Zucker bien podrían ser hermanos y tener una carnicería.
  4. Qué lindo no tener que hablar; y que cada vez que me viene algo, saco la birome, el cuaderno tamaño primer grado, y escribo frenética. Todos me miran. Todos me importan muy poco (un concepto que les debe resultar más que ajeno, casi alienígena). Besote.

lunes, 8 de noviembre de 2010

In

Si, vení, pasá. Sentate. Ahí, sí, donde quieras en realidad. Sí, sí, sacate. No me moles- me gusta tu olor a pata. Me gusta tu. Todo me gusta. Qué precoz, el vaticinio de la tragedia, lejana o inminente? 
La marea que crece rápido. A la mañana solo quedan los pocitos de los bichos sin nombre. 
Quedate ahí, mirame (con temple, que nunca falte) con perplejidad y fanatismo. Del instantáneo, aunque un poco infundado. Y paciencia, mientras me pinto (y despinto) la misma uña 6 veces. Quedate, mirá, tocá, escuchá una parte, ya vas a distinguir, elegir (yo elijo, mi invitado de honor. Vos elegís venir, acá. Este, y no otro lado. Él/Ellos elige/n, no molestar, do not disturb). Esto sí, esto importa. Esta otra parte ni sabe que la está diciendo, su cabeza le ganó de nuevo, la lengua trata de seguir el ritmo pero no, ya es. 
Tarde, quedate hasta tarde, me cuesta dormir, no quiero nuevos sueños, no quiero misterios, no quiero armar mi propia aventura en la dimensión onírica. No tengo ganas, pero qué sueño tengo. Los bebés se quedan dormidos, no se van a dormir, el sueño les gana y a mí también, a mí eso y todo. 
Leemos? Busquemos construcciones lindas, divorciémoslas de sus contextos, quiero solo lo. Qué lindo que sos. Palabras gemelas, no de iguales, sino como almas. Siempre me imaginé las almas de color lila, ahora que lo pienso, bastante parecidas a las aguas vivas. Cellar door. Quién es quién, a mí cuál me toca? 
Vení a mi cellar, tomá esto. Es amor desordenado (y por demás fragmentado) lo metí en una bolsa para no perder pedazos. Aunque no sé si están todos. Jugamos? Lo armamos? Ayudame, quedate. Vos hacé los bordes. 
Y si vamos a dormir? Mañana lo armamos, van a estar ahí. Las piezas. Todas. Te prometo. Sí, las conté, si las hice yo. No, ya sé que no me quedó prolijo. No te gusta? Entonces de qué te quejas? 
(Bostezo) mío. (Bostezo) tuyo. Una plaga, pandemia de sopor. Dale, vamos. Intentemos no soñar, me da fiaca, evitemos la disección matutina, la interpretación de lo que –Freud mediante- está más allá de nosotros. Por suerte. Ideas que se exilian a un lugar al que no podemos llegar, que nos salvan de ellas, de su complejidad, y se martirizan. 
Mañana vemos, mañana pensamos. Necesito ayuno neuronal. No, no sé si existe. Quizás lo inventé. No sé, importa? A mí no, eso no. Todo lo demás. Más vos, eso sí. Eso importa. Ahora. Y mañana también, seguro.